Con la llegada del otoño en Chile y el descenso progresivo de las temperaturas, muchas familias comienzan a buscar soluciones efectivas para mantener el calor en sus hogares durante el invierno. En este contexto, las ventanas termopanel se han convertido en una de las alternativas más recomendadas y valoradas por quienes desean mejorar el confort térmico y reducir el gasto energético. Pero surge una pregunta común entre quienes están considerando esta mejora: ¿conviene más instalar ventanas termopanel de PVC o de aluminio? Ambas opciones tienen ventajas concretas, y la elección dependerá de las necesidades de cada vivienda, del clima de la zona y del estilo arquitectónico. Lo primero que hay que saber es que una ventana termopanel está compuesta por dos vidrios separados por una cámara de aire o gas, lo que mejora notablemente la aislación térmica y acústica. Este tipo de sistema evita que el calor generado por estufas, calefactores o sistemas eléctricos se pierda fácilmente, lo cual se traduce en una mayor eficiencia energética. En ciudades chilenas como Santiago, Temuco, Puerto Montt o Chillán, donde el frío puede ser intenso durante la noche, este tipo de ventanas marcan una gran diferencia.
Las ventanas termopanel de PVC han ganado gran popularidad en Chile por su excelente capacidad de aislamiento. El PVC es un material que no conduce el frío ni el calor, lo que significa que mantiene la temperatura interior estable por más tiempo. Además, este tipo de ventanas no requiere mantención frecuente, no se oxida ni se deteriora con la humedad, y presenta una muy buena hermeticidad frente al viento. Son especialmente recomendados para viviendas ubicadas en zonas del sur o en comunas donde se busca mayor eficiencia energética. Por su parte, las ventanas termopanel de aluminio destacan por su resistencia, durabilidad y estética moderna. El aluminio es un material liviano pero muy resistente, ideal para ventanas de gran tamaño o diseños con marcos delgados. Aunque el aluminio es naturalmente conductor del frío, hoy existen modelos con ruptura de puente térmico que mejoran significativamente su comportamiento aislante. Estas ventanas son ideales para quienes valoran un diseño más estilizado y una larga vida útil del producto.
Entonces, ¿cuál es mejor? Todo depende del proyecto. Si se busca la máxima eficiencia energética, especialmente en zonas frías o viviendas donde se desea evitar pérdidas de calor, las ventanas termopanel de PVC son una excelente elección. Si el foco está en la durabilidad, el diseño contemporáneo o la resistencia estructural, las ventanas termopanel de aluminio cumplen perfectamente su función. También influye el presupuesto, ya que en general el PVC es más económico, aunque ambas opciones entregan una excelente relación precio-calidad si se consideran sus beneficios a largo plazo. En esta época del año, cuando las temperaturas comienzan a bajar y se anticipa un invierno más frío de lo habitual, invertir en ventanas termopanel es una decisión inteligente. Estas ventanas no solo permiten un ahorro energético considerable, sino que también mejoran la calidad de vida al mantener los espacios más cálidos, silenciosos y protegidos de la humedad.
Además, el valor de una propiedad aumenta cuando se incorporan elementos de eficiencia térmica como estas ventanas, lo que las convierte en una inversión rentable. En Arcalum, ofrecemos soluciones personalizadas de fabricación e instalación de ventanas termopanel en Chile. Contamos con una amplia experiencia en proyectos residenciales y comerciales,
adaptándonos a las necesidades de cada cliente y al tipo de construcción. Ya sea que optes por PVC o aluminio, nuestro equipo puede ayudarte a elegir la mejor opción para tu hogar. Este otoño, no esperes a que el frío se instale por completo. Planifica con tiempo y mejora tu hogar con ventanas termopanel eficientes, duraderas y adaptadas a tu estilo. Contáctanos hoy y da el primer paso hacia un invierno más cómodo y cálido junto a Arcalum.